El paro de larga duración disminuyó en 2017 un 13,02 por ciento en Cantabria

13/01/18


El número de parados de larga duración en Cantabria disminuyó durante 2017 un 13,02 por ciento, registrando la Comunidad 2.321 desempleados menos al finalizar el año. Este dato refleja una reducción por encima de la media de paro, que bajó en Cantabria un 12,52 por ciento ¿o 5.513 personas en cifras absolutas-, el mayor descenso a nivel nacional.

Asimismo, y con datos del Servicio Cántabro de Empleo (EMCAN), el paro de larga duración descendió en Cantabria un 21,84 por ciento entre 2015 y 2017, años que se corresponden a la actual gestión del Gobierno regional.

De esta manera, y con 4.332 personas menos en esta situación en dicho periodo, el consejero de Economía, Hacienda y Empleo, Juan José Sota, ha subrayado el "efecto positivo" que tienen en el "colectivo de parados más vulnerable" las políticas activas de empleo y formación puestas en marcha por el Ejecutivo.

Así, califica los datos como "alentadores" ya que, al finalizar 2015, en Cantabria había 19.831 personas que llevaban más de un año sin trabajar, mientras que a finales de 2017 esta cifra disminuyó hasta las 15.499.

El responsable de Empleo ha destacado que la reinserción al mercado laboral de los colectivos más vulnerables es el principal reto del Gobierno de Cantabria en materia de empleo. Por ello, desde su llegada a la Consejería, se han implementado medidas para evitar la marginalización de estas personas.

Además, su departamento trabaja para atajar el deterioro de las tasas de salida por falta de demanda de empleo ya que, como ha explicado, los parados pueden llegar a perder motivación y habilidades tras un largo periodo de inactividad, así como experimentar una disminución en la intensidad de la búsqueda.

Asimismo, las empresas, en ocasiones, desconfían de los trabajadores que llevan mucho tiempo en desempleo, lo que provoca en ellos un "efecto estigma" que empeora aún más su situación.

Por todo ello, Sota ha explicado que el Ejecutivo ha diseñado políticas activas que se ajustan a esta realidad, como la asistencia personalizada por parte de expertos en inserción laboral y una "considerable" inversión en formación.