Pasaje Seguro pide responsabilidad y contención a las instituciones y prensa santanderinas al tratar las migraciones

23/10/18


Pasaje Seguro denuncia que es absurdo y desproporcionado generar la sensación de que en Cantabria hay un problema grave de inmigración ilegal, y recomienda a los medios y responsables institucionales contención para no caer en un amarillismo que fomente la xenofobia.

El grupo ciudadano cita como ejemplo lo que consideran que tiene tintes de “campaña” en el Diario Montañés, “tal vez sin otra intención que aprovechar el tirón noticioso de la cuestión migratoria”. Este medio afirmaba exageradamente, a mediados de mes, que se habían contabilizado 700 intentos de entrada en el Ferry, cuando según datos suministrados por la Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado han sido 568 intentos unipersonales en el último año, y cada vez son menos los devueltos, lo que hace pensar que son pocas las llegadas y muchos los que lo intentan constantemente. Entre julio y septiembre solo se detectaron cuatro personas que habían conseguido llegar a territorio inglés frente a los 40 del semestre anterior. Las personas que realizan los intentos, en su mayoría ciudadanos albaneses con el visado europeo caducado, que buscan llegar a Inglaterra, suelen repetir los intentos, por lo que ni mucho menos se puede considerar un contingente notable.

Destacan que el diario cántabro ha utilizado una retórica xenófoba desaconsejada por las organizaciones de Derechos Humanos como el empleo del término “avalancha”, inapropiado para personas y, además, en este caso, completamente exagerado. Otros medios han empleado, de nuevo probablemente sin ser conscientes del efecto que esta expresión puede tener en la población, “presión migratoria”, voz con connotación alarmista. Y pocos medios han reseñado que los ciudadanos albaneses tienen el visado europeo caducado. Piden responsabilidad ya que nos encontramos en un momento de auge de los discursos del miedo que generan xenofobia, algo totalmente inapropiado respecto a la situación migratoria real de Cantabria.

Asimismo, consideran sorprendente que el Puerto pidiera, a mediados de mes, más efectivos pero justo en esta semana, al tiempo que se suman al dispositivo portuario dos vehículos de la Unidad Móvil de Control de Fronteras de la Policía Nacional y que su presidente, Jaime González, haya afrimado que "se están reduciendo los ratios de llegadas a Inglaterra lo que indica que estamos en el buen camino", se anuncie la construcción de una valla de cuatro metros que transmite la sensación inexacta, incluso desde el punto de vista de impacto visual, de que en Santander hay un serio problema con la inmigración irregular.  

Pasaje Seguro lamenta que el presidente del puerto esté más preocupado por la conducta de un grupúsculo de albaneses con el visado europeo caducado que tratan de buscar una vida mejor que por el hecho de que desde sus instalaciones se esté enviando material bélico a Arabia Saudí, material que acabará asesinando población civil en Yemen. Es más, destacan que González se ha permitido señalar que su objetivo es también “minimizar la presencia permanente en el centro de la ciudad de colectivos que pretenden inmigrar”, refiriéndose a albaneses o iraquíes, cuando no hay ninguna queja de los vecinos de Santander al respecto. Este tipo de declaraciones en responsables institucionales, insisten, fomentan la xenofobia y dan alas a los discursos ultraderechistas.

Al colectivo ciudadano le sorprende también la actitud del delegado de gobierno, Pablo Zuloaga, con quien se reunieron hace escasas semanas. En aquella reunión, el delegado de Gobierno les indicaba que conocían que los saltos eran casi siempre de las mismas personas, que lo intentaban y lo volvían a intentar. En la misma línea, este pasado sábado, Víctor Casal, portavoz del grupo parlamentario socialista, reconocía públicamente a preguntas de Pasaje Seguro en una entrevista pública de la ciudadanía a los responsables políticos, celebrada en la Plaza del Ayuntamiento de Santander, que la exageración de la dimensión de los hechos era una muestra de amarillismo periodístico. Sin embargo, ahora el delegado y su partido apoyan la construcción de la valla, en otro bandazo de los que empiezan a ser habituales en la política del actual gobierno.

Sobre la referencia a las presuntas mafias, este colectivo considera que tales afirmaciones deberían refrendarse policialmente o estarán, nuevamente, generando una alarma injustificada y dañando la imagen de Santander y de unos ciudadanos extranjeros cuyo único delito es aspirar a una vida mejor.

Pasaje Seguro quiere insistir en que semejantes actitudes fomentan la xenofobia y el racismo, son irresponsables, y abonan un discurso del miedo que está pasando factura en Europa, con el auge de las opciones de extrema derecha que aprovechan la cuestión de las migraciones para hacer populismo xenófobo. Por todo ello, ruegan a medios y responsables proporcionalidad y responsabilidad en sus discursos.