La presidenta de Cantabria llama a la unidad y al "constitucionalismo militante" para hacer frente "al mayor abuso institucional" en democracia

05/12/23


La presidenta de Cantabria en el acto conmemorativo del 45 aniversario de la Constitución Española celebrado en el Parlamento de Cantabria. Foto: Lara Revilla

La presidenta de Cantabria, María José Sáenz de Buruaga, ha hecho un llamamiento a los cántabros a favor de la unidad y a sumarse al "constitucionalismo militante" frente "al mayor abuso institucional" en democracia, en alusión a los acuerdos de investidura de Pedro Sánchez con los independentistas. 

Buruaga ha defendido que, 45 años después de su aprobación, la Constitución Española "sigue siendo la solución" como espacio de libertad, concordia y moderación, y ha pedido a los cántabros unidad en torno a sus valores, principios y políticas "que han funcionado" durante su vigencia. El actual marco constitucional que ha supuesto para el país "prosperidad y seguridad", ha dicho, está ahora "en riesgo" y se tambalea" para "satisfacer una ambición personal" del presidente Pedro Sánchez, que ha conseguido poner a España "del revés": "los que están en contra de España, deciden el futuro de España".

Así lo ha señalado la presidenta cántabra hoy, en un acto celebrado en el Parlamento regional, organizado por El Diario Montañés, sobre la vigencia de la Constitución 45 años después de su aprobación, y que ha reunido a representantes de todos los grupos parlamentarios, así como a miembros de entidades representativas, como la CEOE, el Consejo Económico y Social, la Universidad de Cantabria y de la Universidad Europea de Madrid.

La jefa del Ejecutivo regional ha considerado que solo "una gran reacción social" podrá parar los "inmensos pasos atrás en nuestra democracia", porque "esto no es lo que los españoles hemos votado y tampoco lo que propugna la Constitución", que debe de seguir siendo, según ha dicho, "el dique de contención frente a quienes nos quieren separar". 

Buruaga ha mostrado además su preocupación por el "impacto negativo" del acuerdo de investidura de Sánchez sobre los intereses de Cantabria y la ruptura del principio de igualdad entre españoles. "Me preocupa que esos privilegios económicos que exigen algunos para sus territorios, sean a costa de perjudicar a los demás", ha señalado la presidenta en su discurso, tras lo que ha dicho que "ningún español es más importante que otro" y "los cántabros somos tan ciudadanos de primera como los demás".

Frente a ello, ha asegurado que Cantabria "no permanecerá quieta, ni callada" y ha avanzado que la Comunidad prepara ya el recurso institucionalidad contra la ley de amnistía e insistirá en su petición de convocar la Conferencia de Presidentes para que el futuro de España se decida "entre todos", y no de forma bilateral entre Sánchez y los independentistas catalanes.

Por eso, ha exigido "multilateralidad" y "consenso" de las comunidades autónomas frente "a los pactos secretos a dos", que suponen privilegios y desigualdad, y ha asegurado que defenderá "con contundencia" la agenda de reivindicación regional y "el proyecto común que es España".

"No podemos retroceder en derechos y libertades, en autogobierno, en convivencia ni en progreso", ha enfatizado la presidenta, quien ha avisado que España "ni se negocia ni se rinde" y ha abogado por el trabajo conjunto para defender la Constitución y la democracia en beneficio de las siguientes generaciones.