Santander pionera en la atención a mayores al monitorizar a usuarios de teleasistencia

08/11/20


Álvaro Lavín explica que esta solución tecnológica se está probando con cinco usuarios voluntarios y en colaboración con la empresa Atenzia, para mejorar la calidad de vida de los mayores y los tiempos de respuesta ante posibles incidencias que se puedan producir en sus hogares.

Santander está probando un proyecto piloto por el que se monitoriza a un grupo de cinco usuarios voluntarios del servicio municipal de teleasistencia, con el objetivo de mejorar su calidad de vida y los tiempos de respuesta ante posibles incidencias que se puedan producir en sus hogares.

Así lo ha dado a conocer el concejal de Servicios Sociales y Mayores, Álvaro Lavín, quien explica que se trata de un proyecto de innovación, denominado ‘M-Sec’, que se lleva a cabo entre Europa y Japón, y en el que participa como socio el Ayuntamiento de Santander, que está financiado conjuntamente por la Comisión Europea y el Instituto Nacional Japonés de Tecnología de la Información y Comunicaciones.

La solución tecnológica, que tiene el nombre de ‘Senior Care’, es una plataforma de IoT (Internet de las Cosas) que permite saber en todo momento cómo se encuentran los mayores o dependientes mediante el despliegue de una serie de sensores en el hogar: sensor de ocupación de cama, de apertura de puertas y ventanas, de movimiento, etc.

Como ha explicado, estos sensores detectan posibles situaciones de emergencia y permiten activar la petición de ayuda sin necesidad de que la persona mayor pulse el botón que habitualmente solicita el servicio, posibilitando una respuesta inmediata y acortando los tiempos de reacción en beneficio de los usuarios.

Teniendo en cuenta que muchos mayores son reacios a las nuevas tecnologías, una de las principales ventajas del proyecto es que no es necesaria su interacción con lo sensores y además los teleoperadores pueden ver sin que el usuario toque su medalla si le ha podido ocurrir algo.

Lavín ha afirmado que este piloto se está desarrollando en colaboración con Atenzia, -la empresa responsable del servicio de teleasistencia en la ciudad-, y Worldline – coordinador del proyecto y facilitador de la solución tecnológica-, y tiene especial interés también por el tratamiento de los datos sensibles, garantizando la integridad de los mismos con mecanismos de seguridad adicionales que protegen la información personal de posibles ataques cibernéticos que podrían conducir a acciones erróneas por parte de los teleoperadores del servicio de teleasistencia.

Al tratarse de una experiencia piloto perteneciente a un proyecto de investigación, los dispositivos y la solución a probar puede fallar. Por este motivo y para garantizar en todo momento la correcta prestación del servicio, se decidió mantener activo el servicio analógico (el que aporta Atenzia a través de la medalla, la atención telefónica y las visitas presenciales) reforzado con estos sensores.

Así, el personal de Atenzia comprueba el estado del usuario a través de su sistema y, adicionalmente, a través del nuevo sistema Senior Cae.

 “En una sociedad cada vez más envejecida y en contextos como el actual, en el que los mayores y dependientes se están viendo especialmente golpeados por la pandemia, es imprescindible colaborar en proyectos que nos permitan avanzar hacia nuevas soluciones que garanticen el bienestar de vecinos de avanzada edad que quieren vivir de forma independiente”, ha añadido el edil.

Proyecto M-Sec

El proyecto M-Sec, que se inició en julio de 2018 y tiene una duración de tres años, es la tercera colaboración entre Europa y Japón en la que participa el Ayuntamiento.

El consorcio está compuesto por doce socios, entre ellos el Ayuntamiento de Santander, y cuenta con la participación de empresas y organizaciones de Grecia, Francia, Irlanda, España y Japón.

Ha sido concebido como una solución al gran desafío de la privacidad y seguridad en las ciudades. Basado en tecnologías de seguridad multicapa, el proyecto apuesta por el uso de las nuevas tecnologías como herramientas para desarrollar soluciones innovadoras que ayuden a resolver problemas urbanos comunes.

A lo largo de estos tres años, se está trabajando en el desarrollos de las soluciones tecnológicas y en cinco experiencias piloto en diversas temáticas, en las que se prueban y validan dichas soluciones en entornos reales (las ciudades de Santander y Fujisawa que forman parte del consorcio), y haciendo participes a los ciudadanos.

En este proyecto se combinan los beneficios de tecnologías tales como el Internet de las Cosas (IoT), almacenamiento en la nube (Cloud) y cadena de bloques (Blockchain) para ofrecer servicios más seguros.

Con este nuevo piloto, Santander continúa su proyección ligada a la innovación tecnológica, gracias a la participación activa de la ciudad en 26 proyectos que cuentan con financiación de la Unión Europea y en los que ha colaborado con más de 300 socios.