El Museo Nacional y Centro de Investigación de Altamira confía un año más en el IIIPC para la monitorización y seguimiento del riesgo geológico en la cueva de Altamira

13/01/21


El Museo Nacional y Centro de Investigación de Altamira ha confiado, un año más, en el Instituto Internacional de Investigaciones Prehistóricas de Cantabria (IIIPC) para realizar el estudio y monitorización de la estabilidad del macizo rocoso en la Cueva de Altamira. Se trata de unos trabajos, iniciados en 2019, que se amplían, en este momento, hasta diciembre de 2021 y que dirige, como investigador responsable, Miguel Ángel Sánchez Carro junto a la también investigadora Viola Bruschi, ambos profesores de la Escuela de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos y miembros del Instituto.

Según la directora del Museo Nacional, Pilar Fatás Monforte, la ampliación de este proyecto responde al “trabajo fundamental” para conocer los desplazamientos del macizo rocoso sobre la cueva por lo que “dados los buenos resultados obtenidos”, considera “de vital importancia continuarlo y ampliarlo a nuevas zonas de trabajo”.

El objetivo del proyecto ha sido, desde su inicio, llevar a cabo la monitorización de discontinuidades y bloques del macizo rocoso que alberga la cueva de Altamira que han sido señalados como zonas de alto riesgo geológico. Para ello, se emplean dispositivos que precisan la mínima intervención física y permiten el estudio combinando la caracterización del terreno tanto desde el exterior, por ejemplo, mediante el uso de drones, como desde el interior mediante el control de desplazamientos de bloques y apertura de discontinuidades en el rango de micras.

Un aspecto prioritario de la investigación es llevar a cabo el estudio con una mínima intervención física en el interior y exterior de la cueva, al mismo tiempo que se actúa en el sentido de solventar la dificultad de accesibilidad a la superficie del macizo rocoso en las zonas de estudio localizadas en una sala o galería de grandes dimensiones y/o altura. El análisis del terreno desde el exterior mediante el uso de un dron se lleva a cabo desde el IIIPC gracias a que la profesora Viola Bruschi dispone de la licencia de Nivel avanzado de piloto de RPAs.

Los resultados obtenidos en este proyecto permitirán tener un conocimiento detallado de la estabilidad del macizo rocoso que alberga la cavidad y una monitorización en continuo, que junto con otras técnicas, permitirán identificar el efecto causado por posibles intervenciones llevadas a cabo en un entorno próximo a la cavidad.

IIIPC

El Instituto Internacional de Investigaciones Prehistóricas de Cantabria (IIIPC) es un instituto universitario de investigación de carácter mixto, de titularidad compartida por el Gobierno de Cantabria, la Universidad de Cantabria y Santander Universidades. El Instituto se dedica a la investigación en Prehistoria, en sus apartados de investigación básica y aplicada, así como a proporcionar asesoramiento técnico en el ámbito de su competencia. Sus líneas prioritarias de estudio son: Arte prehistórico, Paleolítico y Mesolítico del SO de Europa, origen y desarrollo de las sociedades campesinas, primeros pobladores del continente americano, tecnología prehistórica y Bioarqueológía.

El IIIPC ha sido pionero o lidera el desarrollo de nuevas metodologías y técnicas de análisis en Prehistoria. Entre ellas destacan las técnicas de recogida de información espacial en los yacimientos arqueológicos, las técnicas de estudio del arte rupestre, los métodos de estudio de las tecnologías prehistóricas, los sistemas de control de estabilidad en medios cársticos que contienen yacimientos arqueológicos, las técnicas de monitorización de condiciones ambientales que afectan a la conservación del arte rupestre o los análisis bioarqueológicos.

Desde el año 2005, el IIIPC edita la serie “Monografías del Instituto Internacional de Investigaciones Prehistóricas de Cantabria”, destinada a difundir los resultados de las investigaciones del propio instituto y, en general, la producción científica en el campo de la Prehistoria.