La Junta de Gobierno propone modificar el reglamento del pleno para evitar la reiteración de mociones

18/10/17


La Junta de Gobierno Local del Ayuntamiento de Santander ha aprobado este martes una propuesta para modificar el Reglamento Orgánico del Pleno con el fin de evitar la reiteración de mociones ya rechazadas por la Corporación.

La propuesta, que ya ha sido trasladada a los grupos municipales para que puedan realizar consideraciones o enmiendas, trata de evitar prácticas que entorpezcan el funcionamiento o devalúen la labor del pleno, y contribuir a la vez a una mayor seguridad jurídica.

Según ha explicado el portavoz del equipo de gobierno, César Díaz, la modificación consistiría en la introducción de un nuevo apartado en el artículo 45 del Reglamento para regular una cuestión que hasta ahora no se había previsto en el documento, como es la repetición de mociones.

En concreto, lo que se plantea es establecer que, una vez rechazada una moción por el pleno, no podrá reiterarse su presentación en los seis meses siguientes.

Y se entendería que se produce tal reiteración cuando una moción tenga contenidos idénticos o sustancialmente iguales a otra ya rechazada o cuando persigan el mismo propósito o finalidad determinada.

Con esta medida se busca “evitar prácticas entorpecedoras de la legítima y efectiva labor de control de los órganos de gobierno municipal” con iniciativas que conducen a un “innecesario alargamiento de las sesiones plenarias, al desenfoque de la propia labor de control y a la devaluación de la institución”.

Se trata, en definitiva, de poner en valor la labor del pleno, respetando en su integridad los derechos de los concejales y garantizando la seguridad jurídica, ha resumido Díaz.

El portavoz del equipo de gobierno ha resaltado que nada más aprobarse la propuesta en la Junta de Gobierno Local ha sido trasladada a los distintos grupos municipales para que puedan realizar consideraciones o enmiendas a la modificación de este artículo, con la que se pretende dar una respuesta ágil a una situación que está afectando ya al funcionamiento ordinario del pleno y requiere, por tanto, de soluciones inmediatas.

Una vez trasladen sus propuestas los grupos, la modificación deberá debatirse en comisión y, posteriormente, se someterá a la aprobación inicial del pleno, tras lo cual saldrá a información pública.