Puigdemont y Comín recibirán de la Eurocámara casi 70.000 euros de salarios atrasados

08/01/20


La sentencia europea que permitirá al expresidente catalán Carles Puigdemont y al exconsejero Toni Comín acceder a la Eurocámara como diputados de pleno derecho no solo les proporcionará inmunidad y un potente altavoz mediático. Ambos verán crecer con fuerza en unas semanas la cifra que figura en sus cuentas bancarias. Fuentes de la administración del Parlamento Europeo confirman que les abonarán los salarios y dietas que les correspondía haber percibido como eurodiputados desde el pasado 2 de julio, día de inicio de la legislatura, a pesar de no haber podido desempeñar su función por tener vetada la entrada.

El salario neto de un europarlamentario asciende a 6.824,85 euros mensuales, y las dietas para gastos generales a 4.513 euros. Al haber estado seis meses privados ilegalmente de recibir ambas partidas, el montante acumulado que ahora ingresarán de golpe se aproxima a los 70.000 euros cada uno, casi 80.000 si llega junto a la nómina de febrero. Junqueras también podría beneficiarse de una inyección monetaria idéntica, pero su caso está pendiente de que el Tribunal Supremo autorice su asistencia al hemiciclo y pueda completar el papeleo para ejercer como eurodiputado.

La dieta de gastos generales, que supondrá una parte importante del pago, está destinada a cubrir el alquiler de oficinas, teléfono, suscripciones, actividades de representación, compra de equipos informáticos y organización de conferencias y exposiciones, pero no es obligatorio gastar el dinero el mismo mes que la reciben, y las facturas solo es necesario presentarlas si el Parlamento lo requiere, no sistemáticamente.

El tardío aterrizaje de Puigdemont y Comín en Estrasburgo ha sido finalmente posible debido a una decisión de la justicia europea. El Tribunal de Justicia de la UE determinó el pasado 19 de diciembre que los candidatos electos son miembros del Parlamento Europeo desde la proclamación de los resultados, lo que en la práctica supone que debía haberse permitido a Puigdemont y Comín haber estado en Estrasburgo el 2 de julio en la sesión inaugural. Ese día, la legislatura echó a andar con 748 parlamentarios por las ausencias de Puigdemont, Comín y Junqueras.